El verano acaba de comenzar, estamos planificando las vacaciones, los lugares a visitar y las cosas que puedo usar durante el viaje. Pero, ¿cómo preparar a nuestro gato?
Es importante saber que los gatos, más que los perros, son animales muy habituales : un nuevo hogar, nuevos horarios y nuevos hábitos no siempre son bienvenidos, por no hablar de la alimentación, sobre todo si están acostumbrados a una dieta equilibrada.
Entonces, ¿qué hacer durante las vacaciones?
Afortunadamente, unas cuantas pero importantes reglas son suficientes y el verano será una excelente oportunidad para pasar con nuestro gato todo el tiempo que no podamos dedicarle durante el resto del año:
1 La visita al veterinario : Asegurar su salud es lo primero fundamental, sobre todo si vamos a afrontar un viaje de muchas horas. El veterinario proporcionará las vacunas necesarias para nuestro destino y podrá darnos otros valiosos consejos para que el gato no se estrese demasiado.
2 Organiza las cosas a traer : Aunque no lo parezca, sus objetos como sus cuencos, su manta favorita y juguetes son muy importantes porque pueden ayudar a nuestro gato a sentirse menos desorientado en un lugar desconocido (como una casa o un hotel). Si tu gato está acostumbrado a estar solo en el apartamento, es útil llevar una placa y un collar por si se marcha.
4 El transportador de mascotas : cuando viaje con su gato, debe utilizar siempre un transportador de mascotas adecuado . Debe ser lo suficientemente grande para que el gato se sienta cómodo en cualquier posición que decida adoptar: de pie, sentado o acostado. Si no está acostumbrado a estar en el transportín, podemos acostumbrar al gato a utilizar el transportador ya en casa antes del viaje, para que la salida no represente una novedad indeseada.
5 El medio adecuado : En general, la mejor forma de viajar con animales es en coche: les resulta cómodo y nos ofrece la posibilidad de gestionar el viaje con la atención necesaria y de la forma más cómoda posible. Sin embargo, puede suceder que incluso un corto trayecto en coche sea difícil para un gato: puede hacer demasiado calor, o puede sufrir mareos , como nosotros, por motivos físicos o psicológicos y puede manifestarlo con náuseas, vómitos, etc. miedo y agitación. Por lo tanto, es bueno acostumbrarlo a los viajes cortos en automóvil antes del viaje, para que se aclimate y se asegure de que no sufra mareos en el automóvil. No obstante, si notamos que nuestro gato lo padece, es bueno hablar con el veterinario, quien decidirá si interviene con algún fármaco específico.
Estos son los consejos útiles y prácticos para que nuestro gato se sienta a gusto incluso mientras viaja: ¡al fin y al cabo, él también se merece las vacaciones!